LA CALLE del Obispado, una de las vías que enlaza la plaza de la catedral con el Cañón de la Salud lleva sin iluminación desde hace semanas. Ni una farola de esta estrecha calle luce a lo largo de todo el recorrido, a pesar de que se encuentra en una de las zonas más emblemáticas de la ciudad --intramuros-- y es de las más visitadas.