Los concejales que denunciaron el presunto fraccionamiento de obras, Miguel Cantero e Isidro Rodríguez, no tuvieron que declarar finalmente ayer porque el mismo abogado que pidió su testimonio, el de Elia Blanco, renunció a él ya que lo que pretendía probar en beneficio de Blanco ya "ha siso sobradamente acreditado por el secretario del ayuntamiento".

De los testigos que sí declararon ayer tarde, destacó el testimonio de una exsecretaria de Enrique Tornero que afirmó que ella tramitaba las propuestas de gasto por el sistema informático y que no accedía a las observaciones si estas no llevaban un No o Pendiente del interventor. Pero aseguró que esa propuesta, donde ya se veían las observaciones, se imprimía y se adjuntaba a la factura y "yo la dejaba encima de la mesa de Enrique para que firmara la factura".

Finalmente, los abogados de Blanco y Tornero pidieron impugnar el informe de los peritos que instalaron el sistema informático por "inexactitud" y de la perito judicial que valoró los costes de las obras por "incompleto y su metodología". El de Tornero expuso el atenuante de dilación indebida por el tiempo transcurrido entre que finalizó el proceso y se señaló el juicio.