El tirón de la fiesta del cerezo en flor que se celebra este fin de semana en el Valle ha traído un año más a numerosos turistas como lo demuestra la gran afluencia de visitas que recibieron ya ayer las oficinas de información turística y la avalancha de reservas en los hoteles y casas rurales de la ciudad y los municipios de las comaras así como la sola estampa de las terrazas de la plaza abarrotadas.

Según la oficina municipal, el puente de San José hace el resto aunque viene siendo habitual que desde principios de marzo hasta pasada la Semana Santa, Plasencia no para de recibir visitantes.