La mujer del joven que apagó el incendio y resultó intoxicado contó ayer cómo comenzó: "Empezamos a escuchar voces y mi marido se asomó a una terraza y vio las llamas en el tercero. Cogió una toalla y subió corriendo y al final acabó apagándolo con una fregona". No duda en señalar la valentía de su marido, porque "yo si veo llamas me echo para atrás, pero él me ha dicho que en ese momento no le dio tiempo a pensar en él sino en las mujeres y los niños".