La Asociación de Comerciantes de la Zona Centro ha decidido recoger firmas para forzar la desaparición de "la mendicidad agresiva" --en palabras de su presidente, José María Pérez Castro-- que ha proliferado principalmente en la calle del Sol, pero también en los alrededores del parque de La Isla y San Juan y que el jueves condujo a un joven al juzgado denunciado por atentado a los agentes de la Policía Local.

El parte indica que les amenazó con la cadena del perro cuando fue invitado a abandonar la calle del Sol donde dormía la siesta junto a otros dos jóvenes previa queja de un comerciante. Fuentes judiciales explicaron que fue puesto en libertad hasta que sea citado a juicio rápido con la esperanza de que antes haya desaparecido de la ciudad, según añadió la concejal de Seguridad Ciudadana, Josefa Pérez Camisón.

Se trata de un granadino sin antecedentes penales aunque sí varios por hechos similares al de ayer en distintos puntos del país, según fuentes policiales. No obstante, la directiva de los comerciantes animó a los ciudadanos a denunciarles en Comisaría si les piden dinero con amenazas o insultos aunque todo parece indicar que son molestos, pero no peligrosos.

"La asociación como tal no puede --según dijo el gerente, Juan Carlos Conejero--, sino que tienen que ser los ciudadanos afectados a título particular, que tienen todo nuestro apoyo y no deben temer represalias porque la situación es caótica dado que señoras y hombres mayores se han visto ofendidos por este estilo bandolerismo del XIX".

Añadió que a la asociación sólo le queda el recurso de pedir la presencia disuasoria de la Policía Local. Si bien Carmen Núñez, que compareció también públicamente como Miguel Angel Rodilla y Javier Cortés, abogó por la recogida de firmas como medida de presión.

ACAMPADA ILEGAL

No fue el único desalojo al que procedió el jueves la Policía Local. A media tarde cuando más usuarios recibe La Isla, evacuó a dos hombres extranjeros en estado de embriaguez y que iban con perros sueltos porque estaban provocando molestias. El parte policial añade que el día anterior también fueron desalojados del mismo parque y a la misma hora.

Antes habían desalojado también un campamento de ciudadanos de origen portugués junto al Puente Nuevo invitándoles a abandonar la ciudad, según explicó la edil Pérez Camisón porque la avería de su furgoneta les obligó a detenerse en Plasencia y a acampar en esta zona no autorizada. Lo más grave es que entre ellos había incluso algunos niños de muy corta edad.