La Comisaría de la Policía Nacional no puede sacar más de dos agentes por noche a la calle porque los otros dos policías de turno tienen que atender el 091 y la oficina de denuncias respectivamente. Lo denunció ayer el Sindicato Unificado de Policía (SUP), que representa al 76 por ciento de los agentes en activo.

Sólo la alarma desatada por los robos en el polígono industrial obligó a montar un servicio especial con gran esfuerzo por la falta de personal que arrastra la comisaría y el sindicato advirtió de que la situación no va a mejorar porque mientras el subdelegado del Gobierno ha anunciado para final de mes la incorporación de diez nuevos agentes, hasta nueve van a pasar a segunda actividad con lo que el aumento real será de un policía, según el SUP.

El déficit asumido por la Dirección General de Policía en Plasencia es de diecinueve vacantes de una plantilla total de 41, lo que significa que hoy por hoy hay veintidós agentes en activo. Pero el sindicato calcula que harían falta cuarenta más hasta fijar en 81 la plantilla para garantizar un buen servicio. "Si esto sigue así --advirtió el secretario regional, José Sánchez Espinosa-- nos vamos a encontrar con que en determinadas bandas horarias vamos a tener que cerrar".

No dudó en tachar de "desastroso" un déficit de personal que mantiene en un garaje a las motos de la policía de barrio que no ha vuelto a patrullar mientras el polígono llegó a plantearse contratar vigilancia privada.