El departamento de Intervención ha ordenado el pago a los proveedores municipales con facturas pendientes de cobro desde julio, agosto y septiembre por una cuantía que el propio alcalde cifró ayer en 540.910,89 euros. El procedimiento pasa ahora al departamento de Tesorería con lo que los afectados empezarán a cobrar de forma inmediata. Por otro lado, ayer se cumplió el plazo administrativo para que el ayuntamiento pueda proceder a ejecutar el expediente de modificación presupuestaria aprobado en pleno el pasado día 8 de noviembre de manera que se suplementarán partidas para poder hacer frente a los pagos. Otra cosa serán los gastos realizados sin consignación y que han sido devueltos a los concejales.