La Concejalía de Interior ha iniciado una campaña de control e información sobre la tenencia de perros potencialmente peligrosos. Se trata de "aumentar las medidas de seguridad" y "evitar la imagen de ver cómo hay dueños que pasean con este tipo de perros sin correa, bozal o cadena". El ayuntamiento ha avisado de que la normativa es muy estricta y la policía controlará que se cumple. Establece multas de 300 a 2.400 euros por las infracciones.