El turismo en Plasencia se centra en el valor de su patrimonio histórico-artístico, en la existencia de un espacio protegido, pero también en las zonas verdes.

Vecinos de la ciudad han expresado sus quejas constantes, dirigidas al consistorio, sobre la situación de dejadez que aprecian en los parques y jardines de sus barriadas.

El popular parque de La Rana presenta un aspecto descuidado. Algunos de los columpios están rotos y varios de los bancos situados en los caminos están partidos o a punto de partirse.

ACTOS VANDALICOS Las pintadas en la cruz de los caídos y en el caseto donde se sitúa el reloj solar otorgan un aspecto de dejadez al parque, por no mencionar la basura que se acumula en las zonas traseras utilizadas como centro de reunión de los adolescentes.

Los actos vandálicos son cada vez más frecuentes en la ciudad. No hace mucho, la fuente de la rana fue arrancada y tuvo que ser sustituida por una nueva. Los vándalos rompen farolas y destrozan parques infantiles con mucha rapidez, pero, según los vecinos, el ayuntamiento no los repara con la misma celeridad y --finalmente-- los que sufren las consecuencias son los ciudadanos y sobre todo los más pequeños.

AÑOS SIN REMODELACION Otras zonas verdes, como el parque de San Calixto, lleva años sin remodelaciones.

Son varias las farolas que no lucen y algunas están rotas. La fuente, que es el epicentro de este parque, dejó de funcionar ya hace tiempo, para convertirse en un basurero, que nunca se limpia.

A ello se añade que la fuente la usan en repetidas ocasiones los hinchas de fútbol y forofos del Real Madrid.

El parque de la Salud, situado en frente del conservatorio de música en la calle Trujillo, enclavado en la zona intramuros de la ciudad, también acumula basura y bolsas de plástico y la mitad de las farolas están rotas.

EL PERIODICO EXTREMADURA se hizo eco hace un mes y medio de las denuncias de los vecinos de La Rana, Los Pinos y la Plaza Amarilla, que alertaban del destrozo de los juegos infantiles.

La situación en estas zonas se mantiene, ya que muchos de los columpios de los parques siguen rotos.

SUFICIENTE RAPIDEZ Los vecinos se quejan de que "si hay gamberros que se dedican a romperlos, el ayuntamiento debería darse prisa en repararlos".

Las fuentes de las zonas verdes tampoco se libran de las quejas. A la gran e inerte fuente de San Calixto se le une la de la plaza Santa Ana, que no ha vuelto a funcionar prácticamente desde que se inauguró.

Y la fuente de la plaza de la catedral placentina funciona de manera muy pobre y acumula suciedad diversa en su interior, que no es retirada con suficiente rapidez.

Juan Carlos Herrero, concejal delegado de Desarrollo Sostenible, insiste en que el ayuntamiento sigue trabajando a corto plazo en el mantenimiento de parques.