Hartos de que después de jugar un partido en la Coronación, sus hijos se encuentren con unos vestuarios repletos de suciedad y malos olores y unas duchas en mal estado, los padres de los cerca de 500 niños que juegan cada semana al fútbol han denunciado públicamente el abandono y el descuido en que el ayuntamiento mantiene estas instalaciones. Los jugadores de la liga de veteranos, que suman unos 200, también se han quejado del estado de estos servicios reconvertidos en vestuarios al añadir que "son pequeñísimos y sólo tenemos cuatro duchas y dos servicios para todos".
Pero lo que más preocupa a padres y jugadores es la falta de higiene: "en la práctica del deporte la higiene es fundamental pero están guarrísimos porque sólo limpian una vez a la semana y de las duchas, una veces sale agua caliente y otras fría, así que la mayoría de los jugadores prefiere marcharse a casa para ducharse".
Además, advierten de que esta situación se da también en los vestuarios del parque de La Isla y la ciudad deportiva, por lo que no dudan en criticar que "el responsable de deportes tiene estas instalaciones completamente abandonadas". Sobre los vestuarios de La Isla, explican que "los fines de semana se juegan entre 8 y 10 partidos de fútbol y sólo hay dos vestuarios con unas duchas que funcionan con gas butano y el agua no tiene casi presión".
Pero al problema de suciedad de los vestuarios, unen también el estado de los propios campos de juego porque "no están para jugar al fútbol, cuando llueve se llenan de barro y se te hunden las botas hasta los tobillos. Parece que los que están jugando son cochinos y no personas".
