Al menos cien animales entre galgos, gallinas y gallos de pelea halló ayer la policía local al desmantelar por sorpresa diez perreras ilegales y cinco gallineros en Gabriel y Galán aunque sus responsables lograron desembarazarse de la mayor parte de los perros según vieron llegar los coches policiales. El dispositivo policial, montado en colaboración con la concejalía de Obras, seguirá hoy para derribar un gallinero de más de sesenta metros cuadrados construido con hierros presumiblemente robados de los que rodean a los árboles en crecimiento en el cercano camino del Puerto.

Es la hipótesis que maneja el ayuntamiento, cuyo concejal de Seguridad Ciudadana, Francisco Martín, advirtió ayer de que habrá controles policiales para impedir que vuelvan a montar tal infraestructura. "El dispositivo --explicó el edil-- ha sido en respuesta a una demanda histórica de la asociación de vecinos por seguridad pública, para preservar la convivencia vecinal y también, claro, porque son ocupaciones ilegales de terreno público y privado en algunos casos". Hacía dos años que no había ningún control policial sobre estas construcciones ilegales pese a que algunos vecinos aseguraban que detrás había peleas de perros y gallos.

Durante toda la mañana de ayer, desde bien temprano, operarios municipales fueron derribando la infraestructura con protección policial y ante la atenta mirada de numerosas vecinas en bata no sin algún altercado. Seis personas fueron identificadas y denunciadas a la Subdelegación del Gobierno mientras se hallaron también motos, algunas solo con el chasis, y se detectó la tala de varias encinas en torno a los corrales.