La basura se sigue tirando antes de la hora permitida, las papeleras apenas se utilizan y en las calles aún se ven excrementos de perros. Para concienciar a los placentinos de que con estas conductas no se puede conseguir una ciudad más limpia, la concejala Carmen Blázquez se ha puesto al frente de una nueva campaña de limpieza en la que han colaborado los discapacitados de Placeat y el Ponce de León y el ateneo.

La campaña, que terminará mañana con la instalación en la Hispanidad del Eco-móvil , un vehículo de la Junta, ha querido incidir en el horario y los excrementos de los perros, aunque también ha dado un toque a los comercios al recordarles que deben plegar las cajas y atarlas con un cordón antes de depositarlas en el contenedor "y no amontonar unas encima de otras", insistió la edil.

Blázquez ha contado en esta ocasión con colaboradores como el ateneo cultural y en torno a 80 usuarios de la asociación de disminuidos psíquicos Placeat y el centro de educación especial Ponce de León. Los primeros salieron con la concejala por el centro: "Nos encontramos de todo, desde bolsas de basura a las puertas de las casas a las siete de la tarde, hasta papeles, cartones y excrementos de perros", explica Blázquez.

Además, junto al presidente de Placeat, Paco Valverde, y los usuarios limpiaron los alrededores de la ciudad deportiva con guantes y bolsas. Valverde elogió el trabajo de los jóvenes: "Hay que educar para no ensuciar y así como tenemos nuestros centros limpios, debemos también limpiar la ciudad, que es el cuarto de estar de todos los ciudadanos".