Un refrán adaptado a los amantes del tunning: Dime qué coche tienes y te diré quién eres. Lo que empezó como una moda ha dejado de serlo para ganar cada vez más adeptos. Y si no, que se lo pregunten a Ladislao Granados Montes, representante del Club Tunning Extrematunning, que empezó con una docena de socios y ahora tiene 350 entre Plasencia y el norte.

Ladislao subraya que la esencia del tunning es "personalizar el coche, tanto que algunos no sabes de qué marca son". Porque ésta es una afición cara y, aunque haya piezas baratas, "el que prepara un coche no va a lo barato, y todos los meses se gasta algo". Ladislado apunta algunos precios: "Un equipo de música puede costar 6.000 euros, una pantalla multimedia de techo, 1.000, una rueda, 3.000 y un juego de llantas 6.000. Un coche completo puede salir por 35.000 euros". Algunos se pudieron ver en la concentración nacional organizada por el club.