No le falta razón a la oposición en su tirón de orejas a la alcaldesa y no sé yo que sea su cumpleaños. Y es que estamos en el ecuador de la legislatura y el gobierno del PSOE no ha hecho los deberes en los proyectos enquistados de Plasencia city con los que Elia Blanco podría lucirse si empezara a gestionar soluciones, pues eso, a las huertas de La Isla y a Santa Bárbara.

Pero va camino de ser otro alcalde más que ni resuelve ni es capaz de dar un puñetazo en la mesa para advertir a su PSOE del alma de que el AVE del futuro tiene que tener aquí parada y fonda. Como el perro del hortelano, porque veta la moción de la oposición no porque ZP le haya dicho bajo secreto de confesión que cuente con ello, sino porque es competencia suya y no del pleno. Pues que no sea tímida y nos cuente qué ha hecho ella de su cosecha.

A ver si es que no hay nada que contar. Desde luego no me veo en el curso antiestrés de la universidad popular a los concejales del PSOE porque qué pachorra desde que se ha esfumado la amenaza de la moción de censura. Por favor, Victoria Domínguez, dales un sustino. Que el eslogan de los nuevos autobuses urbanos va a tener que ser los verás, pero no los catarás, porque todavía falta intendencia. Y enseguida va Pepa Camisón, exedil de Tráfico, hoy en la reserva de la oposición, y dice que culpa suya no es y que demos gracias al senador Alvarez si los tenemos ya en un almacén.

Qué libro no haría Valle Inclán con tanto esperpento. Y por si faltaba poco, dice el PSOE que el 90% del programa electoral está en marcha. Hay que ver qué poco ocupan las huertas y la sierra de Santa Bárbara.