Victoria Domínguez, presidenta y concejala de Unión del Pueblo Extremeño (UPEx), ha roto el pacto de gobierno que suscribió al inicio de la legislatura con el PSOE y que dio a Elia Blanco el sillón de la alcaldía. Lo ha hecho al renunciar tanto a la delegación de Urbanismo que le concedió a cambio la alcaldesa por decreto como a la segunda tenencia de alcaldía, que también ostentaba y, a partir del próximo pleno, seguirá en el ayuntamiento únicamente como concejala de su grupo político.

La decisión no supone, no obstante, un nuevo equilibrio de fuerzas en el ayuntamiento, ya que el gobierno del PSOE no cuenta con UPEx para ganar sus votaciones desde que Miguel García Pintor y Pilar Sánchez abandonaron el PP para pasar a ser concejales no adscritos. Su apoyo --que presumiblemente seguirán manteniendo-- le ha dado hasta ahora al PSOE mayoría absoluta en las votaciones.

Con todo, Domínguez desveló ayer su renuncia a la delegación de Urbanismo y la ruptura del pacto en el hotel Alfonso VIII, arropada por el comité ejecutivo de UPEx, y la justificó en el último tema que ha provocado diferencias entre el gobierno y la concejala, la descatalogación de 22,73 hectáreas del monte público Valcorchero por parte de la Junta y tras una petición del gobierno, que supone eliminar la protección de esta zona del monte y abrir la puerta a la construcción de 2.800 viviendas.

Domínguez recordó que su partido ha presentado un recurso contencioso-administrativo contra esta decisión, que ha sido admitido ya por el TSJEx y que supone que, entre los demandados, está no solo la Consejería de Industria, Energía y Medio Ambiente de la Junta sino también "y como coadyuvante" el ayuntamiento. "Existía por tanto una incompatibilidad con mi situación en el ayuntamiento como delegada del área responsable de estos temas. Había un choque entre los intereses de UPEx, que son la defensa del patrimonio municipal de Plasencia, y mi situación como concejala de Urbanismo, de ahí que el partido tomará el acuerdo de mi renuncia", explicó.

La concejala ya ha informado a la alcaldesa y esta tendrá que dar cuenta al pleno y decidir también a qué concejal del gobierno encarga la delegación de Urbanismo o si la llevará a partir de ahora ella misma.

Respecto a Valcorchero, Domínguez recordó que la revisión del PGOU ofrece otra solución, mantener la protección del monte y llevar las 2.800 viviendas proyectadas a la zona de La Data. Pero también apuntó como solución aprovechar la zona de la finca Capote, para aumentar la edificabilidad, amén de que quedan 7.000 viviendas por construir en el actual PGOU.

BALANCE "BUENO" Respecto a su balance como socia de gobierno esta legislatura, a excepción del resultado de la tramitación del nuevo PGOU, parada desde el mes de diciembre pasado, lo calificó de "bueno. Se han hecho muchas cosas esta legislatura y eso también es verdad. La Junta ha invertido como nunca, aunque quizás ha habido una mala comunicación con los ciudadanos para hacérselo ver, pero yo sigo estando a disposición de la alcaldía para todos los asuntos de interés para la ciudad", subrayó la exsocia de gobierno.