La policía les pilló cuando consumían bebidas alcohólicas en la plaza José Morales Pascual, en Céntrica y ahora su castigo será pintar fachadas de la zona centro. Así lo ha decidido la concejala de Patrimonio, Mónica García, a la que la junta de gobierno ha acordado nombrar tutora de los trabajos de los menores.

Se trata de dos jóvenes que en septiembre de 2009 y en enero del 2010 fueron sancionados con una multa de 300 euros en virtud de una resolución de la alcaldesa y por una infracción que recoge la ordenanza municipal sobre protección de la convivencia ciudadana y prevención de actuaciones no cívicas.

Las cartas enviadas por la madre de un menor y por el segundo menor han hecho que el equipo de gobierno cambiara de opinión y haya conmutado la sanción por trabajos a la comunidad. No es la primera vez que esto ocurre en el ayuntamiento --el gobierno no aportó datos ayer de cuántos casos se han dado-- pero sí la primera que asignan a los menores a la Concejalía de Patrimonio.

La concejala del área, Mónica García, avanzaba ayer que su intención es destinarles a pintar fachadas en mal estado de la zona centro para colaborar así con la campaña que tiene en marcha de requerir el arreglo de fachadas del casco histórico por ornato y decoro.

"No sé si pintarán fachadas públicas o privadas, me haré un listado de las que están a su alcance y en los itinerarios turísticos y decidiré".

Su intención es reunirse con los menores después de la feria para concretar sus trabajos, que deberán realizar durante 30 días y subrayó que todas las medidas de seguridad estarán garantizadas: "No podemos olvidar que no es personal especializado, así que pintarán aquellas fachadas que no supongan un peligro para su seguridad".

El objetivo de estos trabajos será, por un lado, que los menores tomen conciencia de sus actos y se hagan responsables de una actitud incívica y prohibida por la ley y, por otro, contribuir a mejorar el aspecto del casco histórico con trabajos de utilidad pública.

En agosto del año pasado, el equipo de gobierno también conmutó otra sanción de 300 euros a otro menor que también consumía alcohol en la plaza de Céntrica y que envió una carta solicitando la sustitución de la multa por trabajos. En este caso, los realizó durante 29 días en la oficina municipal de turismo.