El número dos del rincón de San Nicolás, un edificio con fachada roja que destaca detrás de la iglesia, se alzó ayer tarde con el primer premio a la rehabilitación que otorgan la oficina del ARI y el ayuntamiento. Es una obra promovida por particulares para vivienda propia por la que Isabel López Herrero recibió una placa de metacrilato y un diploma de manos de la alcaldesa Elia Blanco, y en presencia del director general de Patrimonio, Francisco Pérez Urban y del director del ARI, Roberto Rubiolo.

Menciones especiales ha habido para la escuela taller por la recuperación de la sede de las viudas en la calle de Las Escuelas, Placonsa por la adaptación del casino y Jesús Miguel Calle por la rehabilitación de un cubo de la muralla en Calvo Sotelo en su local comercial. A esta iniciativa pionera se han presentado ocho participantes.