"Ha sido un golpe muy fuerte por parte de unos dirigentes que no están a la altura de las circunstancias". Así valoró ayer el concejal Miguel Antonio García Pintor la decisión de su partido de suspenderlo como medida cautelar de militancia con el argumento de "que tenía que apoyarme porque llevo más de 25 años en él y al cual he dado una parte muy importante de mi vida". En declaraciones a Efe, hizo un llamamiento público a los dirigentes locales, provinciales y regionales del partido para que "se definan y digan de una vez si quieren que me vaya o que siga perteneciendo al PP".

El PP provincial anunció un día antes la medida cautelar de suspenderlo de militancia mientras una comisión determina su futuro tras haberse hecho público que el juzgado número 3 le ha retirado por ocho meses el carnet de conducir al haber dado positivo en la prueba de alcoholemia que se le practicó tras haberse saltado un semáforo en rojo. El edil reconoció ayer a Efe que "es una falta muy grave" y pidió perdón por ello, pero se quejó del escarnio público al que dice estar viéndose sometido y culpó a sus propios compañeros del PP de Plasencia de haber filtrado interesadamente la sentencia, pese a ser un documento público como el resto de las sentencias.