La cooperativa de autobuses ha pedido al ayuntamiento que rectifique y permita la subida de precios que han solicitado y que se rechazó en una comisión por unanimidad de los grupos políticos. El portavoz de la empresa, Rufino Vázquez, apeló a la alcaldesa para dar una solución a su demanda lo antes posible: "Espero que haya una solución porque de por vida no podemos estar así, espero que la conciencia del ayuntamiento se mueva".

La empresa ha insistido en su demanda con el argumento de que el petróleo ha subido "hasta cuatro veces más que el IPC", lo que les ha afectado bastante porque "estos vehículos consumen más del doble que los anteriores". Además, Vázquez afirma que el seguro de los autobuses también ha subido y los repuestos son más caros, mientras recuerda al ayuntamiento que "no nos ha regalado nada, los autobuses son de ellos y nosotros hemos hecho un sacrificio porque hemos pedido préstamos para hacer la nave y comprar un autobús nuevo".

Con todo, afirma que la empresa lleva perdiendo dinero desde enero a razón de 2.400 a 3.000 euros al mes y se queja de que "en todos los ayuntamientos el servicio es deficitario y aquí quieren que sea rentable".

El ayuntamiento ha basado su negativa en que sólo hace un año que se gasto 1´2 millones en comprar los nuevos buses.