Al menos tres empresas constructoras han sufrido ya la visita de jóvenes que les advierten de que pueden tener problemas en las obras si no les contratan como guardas aunque, por suerte, las amenazas no se han llegado a cumplir. "Aquí sólo hemos sufrido conatos --indica Isidro López-Mateos, secretario de la patronal --pero en el cinturón de Madrid están a la orden del día y algunas de nuestras empresas que trabajan allí lo saben bien".
Quien también lo sabe es el jefe de la policía nacional porque Madrid era su anterior destino, pero llama a la tranquilidad porque en Plasencia no ha recibido ninguna denuncia formal por hechos como estos.
Lo cierto es que las constructoras que han recibido estas desagradables visitas no se han atrevido a presentar denuncia probablemente por temor a represalias, pero coinciden en la narración de la escena que tienen siempre como protagonistas a hombres bien vestidos.
TESTIMONIO "Primero se nos ofreció un día para trabajar de guarda en las obras porque decía que necesitaba el empleo, pero luego se nos presentó ya de malas maneras y con bien de joyas que traía cuando estábamos atendiendo a unos clientes y allí delante se puso a decir que si podían pasar cosas en las obras, que si podía pasarle algo al guarda y que si en Madrid ya estaban entrando por el aro". Este es el testimonio de una de las empresas afectadas.
La federación provincial del sector, Pymecon, no considera de momento que sea motivo para alarmarse porque ninguna de las amenazas ha llegado a materializarse en desperfectos ni robos en las obras ni en daño a nadie, pero los afectados recomiendan precaución mientras la policía pide que se presenten las denuncias por amenazas.
