El consejero de Fomento, José Luis Quintana, entregó ayer las llaves de las últimas 57 viviendas construidas en la urbanización del PIR de Los Monges y que aún no estaban ocupadas. Con estos son 285 los pisos de 60.000 entregados por la Junta de Extremadura en la urbanización, la totalidad de los construidos. Ahora bien, aún quedan por construir 417, 114 de 60.000 euros y 303 viviendas medias.

Se han entregado todas las viviendas de 60.000 euros sorteadas en julio del 2006 y marzo del 2007, pero de las 303 viviendas medias proyectadas, hay 243 que ya tienen dueño porque fueron sorteadas también en marzo del 2007. Sin embargo, no se sabe cuándo les tocará a los adjudicatarios recibir sus llaves porque ni siquiera ha comenzado la construcción de esas viviendas.

La promotora Albatros ha topado con los problemas de falta de financiación de los bancos y el consejero, consciente de ello, se mostró ayer "dispuesto a ayudarles para que sigan trabajando porque queremos que sigan desarrollando las siguientes fases del proyecto", ¿De qué forma se materializaría esa ayuda? Quintana solo adelantó ayer que "probablemente por un cambio en la tipología de las viviendas".

Pero también lanzó un mensaje a las entidades financieras al reclamarles "que apuesten por este tipo de viviendas porque la morosidad es muy baja, mucho más baja que la vivienda libre".

Por eso, insistió: "Hago un llamamiento a las entidades financieras para que apoyen estas viviendas porque es posible construirlas; es seguro que se venden y la morosidad es muy baja", repitió el consejero.

Quintana puso la entrega de viviendas de ayer como ejemplo de que la política de la Junta de apostar por el Plan 60.000 "es una realidad, pese a que fue criticada por otros grupos políticos".

EMOCION Y NERVIOS Ajenos a las polémicas, los adjudicatarios de la última promoción de viviendas de Los Monges esperaban ayer sus llaves en la UNED con "mucha emoción y una sensación muy rara", en palabras de Fátima Barriga que, junto a su pareja, Javier Blázquez, llevaban cuatro años esperando el piso.

Ayer, elogiaban la zona porque "es como estar en el campo, pero a la vez, estás lejos de la ciudad y en unos años va a cambiar mucho", contaba Blázquez.

Los 285 vecinos ya tienen autobús urbano, aunque aún les falta la línea de teléfono fijo. Sobre esto, la alcaldesa decía ayer que "es un problema de Telefónica, pero no hay excusa para que no lleve la línea allí, ni impedimentos del ayuntamiento o por la variante sur. Esperamos que agilice los trámites".