Sí habrá atracciones este año en el ferial. El colectivo de feriantes y el concejal de Festejos, Blas Raimundo, han llegado finalmente a un acuerdo económico, por lo que el recinto del Berrocal no se quedará este año sin cacharritos , como habían amenazado los feriantes.

Según explicó ayer el edil, el conflicto quedó zanjado el sábado con la decisión de rebajar a los feriantes en un 15% la tasa por instalarse, "un descuento que corresponde a la parte proporcional por tener un día menos de feria", subrayó Raimundo. Por otro lado, destacó que los feriantes se han comprometido a no tocar los precios y mantener los del año pasado.

Respecto a la petición de éstos de negociar las tasas directamente con el concejal y no con la empresa adjudicataria, a lo que el edil siempre se ha negado, explicó: "La empresa dio su consentimiento para que nos reuniéramos y hemos decidido que después de feria nos sentaremos las tres partes a solucionar definitivamente el problema". De momento, los feriantes ya han comenzado a montar sus atracciones para que estén listas para la inauguración de mañana.