El XII festival Folk de Plasencia concluyó anoche su décimo segunda edición, y lo hizo en el recinto ferial del Berrocal debido a la amenaza de chubascos con un cartel de grupos internacionales formado por la banda de Oporto Mü, los polacos de la La Warsaw Village Band y la apuesta segura de los suecos de Hedmingarna. La noche comenzó con la actuaciones de los portugueses de Mü, un grupo que según una de sus componentes, Diana, tocan "músicas del mundo" y en su repertorio no tienen "nada de portugal", sino que en sus canciones prima la música "centroeuropea". Esta internacionalización del folk se advierte en los instrumentos procedentes de Europa central, pero también de países más lejanos como Turquía o Japón. De hecho, el nombre del grupo procede del país nipón, y significa 'puerta', explicaron sus miembros antes de subir al escenario. El deseo de Mü es "hacer que el mundo baile", según Diana y España es un país propicio para ello, ya que los españoles "tienen mucha energía y bailan mucho con nosotros". Sobre el Festival Internacional Folk de Plasencia dijeron que lo desconocía, aunque reconoció que en Portugal se conoce su existencia. La Warsaw Village Band, procedente de Polonia actuaron en segundo lugar, un grupo que se vuelca de forma radical en las fuentes para buscar inspiraciones musicales así como virtudes inmemoriales en una continua exploración del folklore y de los sonidos arcaicos de sus ancestros y de sus instintos. Además es una inagotable fuente de diversión, alegría y espontaneidad. La Warsaw Village Band tiene un repertorio compuesto por melodías de danzas folklóricas, baladas y canciones rurales, que son interpretadas de una manera particular, usando una antigua técnica vocal, consistente en la utilización de voces blancas. El resultado de sus trabajos e investigaciones es un nuevo y único estilo de música, llamado bio-techno o incluso hip-hopasa, aunque lo denominan también hard'cora of obora, que viene a significar "hard-core directamente desde el establo". Los suecos de Hedningarna (los paganos) cerraron el Festival Folk placentino, uno de los grupos de mayor relevancia internacional dentro del panorama Folk. La música de Hedningarna se basa según Anders Norrudde en "melodías tradicionales" que han modernizado mediante la modernización también de "instrumentos antiquísimos", construidos por ellos mismos a los que les son aplicados la electrónica. En el escenario placentino presentaron parte de su repertorio anterior más vocal y parte del nuevo centrado ampliamente en lo instrumental.