Se terminó. Acabó una feria distinta a la de años anteriores, en lo que al cañeo se refiere y en la que el recinto ferial volvió a llenarse durante la tarde, noche y madrugada. Ayer fue, sin embargo, el día del descanso, de la resaca festiva. Solo unos pocos quisieron apurar las últimas cañas y las familias acudieron por la tarde a las atracciones del ferial, aunque en menor medida que el sábado.

Porque hoy es el día del niño , lo que significa que las atracciones estarán a mitad de precio y muchos aprovecharán para darse la última vuelta.

Muchos lo hicieron el sábado noche, en que el aparcamiento resultaba imposible en los alrededores del ferial. Fue la noche de la llegada de comarcanos, la noche grande en el Berrocal, tanto en las atracciones como en las casetas. La joven estuvo hasta la bandera y otras como la del Rebujito tampoco se han quedado atrás. Tampoco la de las amas de casa, incluso la municipal tuvo bastante más público que los primeros días, en que la ausencia de barra este año, y por tanto, de mesas y sillas, ha echado para atrás a muchos habituales y ha perjudicado a las orquestas.

Durante todos los días, ha destacado la presencia policial, sobre todo de la local, incluida la brigada canina, en la plaza Mayor y alrededores. También en el ferial y con controles, tanto de la venta ambulante, como de alcohol y drogas. A falta de datos concretos de intervenciones, la tónica general ha sido la de la tranquilidad.

Hoy, piscina e Isla

Los trasnochadores aprovecharon ayer la jornada para dormir y descansar y solo hubo algo de presencia en el ferial por la tarde y para montar a los niños. Porque hoy, vuelve la rutina, la del trabajo, la del colegio, y el inicio de la temporada de verano en la piscina municipal y en el canal de baños de La Isla. Este ya se ha limpiado y habrá controles semanales, del ayuntamiento y de la Junta en semanas alternas. También se abrirán los baños, aunque solo en horario de tarde.