Los pivotes magnéticos deben estar instalados antes de final de año para que el ayuntamiento no pierda la subvención del plan de excelencia, sin embargo, el equipo de gobierno no sabe todavía cómo va a repartir entre los residentes, comerciantes u hosteleros las tarjetas que abrirán los pivotes y, por tanto, permitirán el acceso al centro.

Lo cierto es que ni siquiera existe aún un criterio claro porque Raquel Puertas señaló ayer que no habrá una tarjeta por unidad familiar, pero tampoco una por vehículo porque quiere "conceder el menor número posible de tarjetas para no masificar". Así y aunque ya había encargado un censo de vados y de vecinos con vehículo, anunció que los técnicos municipales van a realizar ahora un estudio serio para definir el número de residentes susceptibles de tener tarjeta y después se abrirá un plazo de solicitud con los requisitos necesarios.

En el caso de comerciantes y hosteleros, el que tengan o no tarjeta dependerá de si tienen la documentación en regla y plaza de garaje.