Los más de 60 kilos de hachís intervenidos por la Guardia Civil en los dos bares clausurados el viernes habrían alcanzado un valor cercano a los 300.000 euros en el mercado, según fuentes de la investigación. La redada ha sido muy bien acogida por los vecinos de ambos establecimientos situados en la céntrica avenida de Alfonso VIII --frente a Correos-- y en la calle Antonio de la Cadena, que comunica Santa Elena con la avenida del Valle.

Ambos llevaban abiertos al menos dos años y los vecinos habían denunciado en la policía el trasiego de gente en varias ocasiones. La operación antidroga continúa abierta, pero el juzgado número 3 de Plasencia ya se ha hecho cargo de la instrucción.

De los seis detenidos, al parecer sólo uno regentaba uno de los locales. El resto los utilizaban, presuntamente, para vender la droga. Se trata de cuatro hombres y una mujer magrebí y otra de origen búlgaro a los que les han sido intervenidos también varios vehículos de gama alta y más de 10.000 euros en metálico como resultado de los registros en los dos bares y en al menos cuatro pisos.