Las excavaciones en la antigua ermita de Santo Tomé han desvelado hallazgos que los expertos no esperaban encontrar. Es el caso de los huesos de un esqueleto humano que ha aparecido en una tumba. Pero no es la única, sino que se han descubierto cerca de una decena, aunque se espera encontrar más y una de las hipótesis que se manejan es que sea anterior a la fundación de la ciudad.

La arqueóloga municipal encargada del proyecto, Cristina Sánchez, explicó que el hallazgo ha sido una sorpresa: "No lo esperábamos porque las referencias históricas con las que contamos, que se remontan al fuero del siglo XIII, no señalan que aquí existiera una necrópolis". En este sentido, señaló que no se trata de tumbas aisladas sino que "la roca está perfectamente explanada y sospecho que podemos encontrar tumbas en una extensión de unos 15 metros de longitud".

Sobre los huesos, apuntó que se pueden apreciar todos los de un esqueleto desde las rodillas hasta la cabeza porque el resto está cubierto por una construcción posterior. Sánchez ya había vaticinado que las tumbas estarían ocupadas porque "todas tienen forma humana". Además, están excavadas directamente en la roca, sin ataúd, y orientadas este-oeste, por lo que descarta que fueran musulmanas, ya que éstas se orientarían norte-sur. Así, lanza la hipótesis de que pudieran ser anteriores a la fundación de la ciudad porque "es raro que una necrópolis así pasara desapercibida para los historiadores".

NO MAS EXCAVACIONES

Sin embargo, aclara que aún es pronto para fecharlas porque además han aparecido en el esqueleto las llamadas orejeras , dos piedras a cada lado de la cabeza que se utilizaban en tumbas a primeros de la Edad Media.

Pese a éste y otros hallazgos, la concejalía de Cultura insiste en paralizar las excavaciones porque no hay dinero, con lo que Sánchez advierte de que es necesario cerrar la zona y consolidar y proteger lo descubierto.