E l año pasado, el Ayuntamiento de Plasencia retiró más de 40 escombreras ilegales e identificó a cinco presuntos autores de los vertidos, al tiempo que abrió expedientes. Recientemente, se ha identificado a otras cuatro personas por un delito que la ley de residuos castiga con penas que van desde los 900 euros hasta 1.750.000. Porque, como ha señalado el concejal de Medio Ambiente, Luis Miguel Pérez Escanilla, «no podemos poner a un guarda detrás de cada persona y van a seguir apareciendo».

El concejal de Ciudadanos, Juan Carlos Hernández, ha criticado a través de sus redes sociales que «proliferan» y culpa al gobierno del PP de haber sido «incapaz de acabar con ellas en ocho años». Pero Escanilla replica que, además de la gran actuación del año pasado, el ayuntamiento conoce cuáles son los puntos calientes y la brigada verde los revisa periódicamente para retirar las escombreras, siguiendo un protocolo «que no ha habido nunca» y se ha creado en esta legislatura.

Lo que sucede es que desde que se localiza una escombrera hasta que se retira trascurre un tiempo, que difiere de una a otra en función del tamaño y del tipo de escombros, ya que los peligrosos debe retirarlos una empresa especializada. Así, el concejal recuerda que puede ser detectada tanto por la brigada verde, como por la policía o por un ciudadano. «Si alguien ve una y llama a la policía, se activaría el protocolo».

Entonces, se iría a la zona para hacer una revisión de los materiales y buscar algún elemento que pudiera identificar al autor. También se toman fotografías y se abre el expediente encaminado a la sanción para finalmente retirarla, bien por la propia brigada, a veces con la ayuda de la de Obras, o contratando a una empresa especializada, como ocurre en el caso de los neumáticos o de objetos con amianto. En estos casos, los tiempos se alargan porque «no siempre vienen con la celeridad que queremos».

Según indica Escanilla, los últimos identificados son ciudadanos particulares, que realizan chapuzas en casa y tiran los escombros para ahorrarse la tasa. Pero también se ha identificado a talleres de cambio de neumáticos que «por no pagar los 4 euros de la tasa, que sí cobran al cliente, los tiran», generando un daño al medioambiente.

Por lo tanto, el concejal subraya que el ayuntamiento sí trabaja para luchar contra las escombreras y que su objetivo final es «poner a los responsables ante la justicia para que paguen porque, de lo contrario, la retirada la pagamos con el dinero de todos».