El último fin de semana de fiestas nocturnas --con la Nochevieja de por medio-- ha concluido con un balance diferente por parte de los vecinos y del ayuntamiento. A falta de los partes policiales de incidencias, el ayuntamiento habla de "normalidad", mientras que la asociación de vecinos Intramuros ha criticado el "escándalo en la calle", lo que ha impedido dormir a los vecinos.

El colectivo señala que, según las denuncias vecinales, el principal problema ha sido el ruido en la calle, con petardos incluidos, "que han tirado hasta en las puertas de los residentes". El edil José María Nisa ha destacado en cambio que "no ha habido incidencias graves, normalidad" y de los petardos, que están prohibidos, señala que han sido esporádicos y no se ha podido pillar in fraganti a nadie.