El madrileño César Jiménez cortó dos orejasa a un manso peligroso que le envió a la enfermería, afortunadamente sin consecuencias. Sufrió un revolcón del manso de turno que le propinó un varetazo corrido de 15 centímetros de longitud en el glúteo y fosa renal derecha de pronóstico leve, según el parte del cirujano jefe de plaza, Emilio Sánchez Barrada.

César Jiménez se enfrentó a un toro mansurrón distraído y descastado que protestaba al tomar los engaños, echando la cara arriba y tirando arreones, por lo que los muletazos que le pudo sacar el torero tuvieron el valor de la entrega y la exposición, sin llegar a cuajar series por la mala calidad del astado.

El cuarto tuvo mejor tranco en la embestida, lo que hizo al torero brindar al público una faena cuidada e instrumentada con la mano derecha, con decisión y entrega excesiva que posibilitó que el toro le enganchara de mala manera, destrozándole la taleguilla, lo que no fue óbice para que siguiera toreando y conseguir las dos orejas para pasar a la enfermería.

Manzanares un toro que se dolía de los cuartos traseros, soso y de arrancada corta que casi nada transmitió al público, aunque el torero insistió hasta conseguir sacar algunos naturales y de buen ver que arrancaron el aplauso del respetable.

Al quinto de feria, que salió sin fijeza, corretón y distraído, a lo que hay que añadir que manso también, poco le pudo hacer el torero a pesar de intentarlo, hasta conseguir algunos muletazos sueltos, arriesgando en una faena más meritoria que artística. De ahí el reconocimiento del público, que le dio una oreja.

TALAVANTE El extremeño Alejandro Talavante brindó al público la lidia del tercero de la tarde, berrerón, flojo y de corto recorrido que protestaba los muletazos del torero cabeceando para alcanzarle la chaquetilla e imposibilitando el lucimiento de su matador. Con el que cerró plaza, un toro chico y protestado por dolerse de la pata derecha, no pudo lucirse. Su insistencia no sirvió de nada.

GANADERIA: Seis toros de Los Bayones bien presentados, descastados, mansos y peligrosos.