La Junta de Extremadura ha decidido derribar y volver a levantar, completamente nuevos, los 64 pisos sindicales ubicados en el barrio del Pilar. Lo anunció ayer el presidente de la Agencia Extremeña de la Vivienda, Javier Corominas, y la decisión recoge el sentir de la mayoría de los residentes de estas casas, que ya manifestaron a finales del 2005 su deseo de contar con pisos nuevos dada la antigüedad de los actuales, de más de 50 años.

Corominas hizo en esa fecha a los vecinos la propuesta de reconstruir las viviendas dada su "baja calidad arquitectónica" --según dijo entonces y reiteró ayer-- y el presidente vecinal, Juan Pablo Castiñeira, pidió acto seguido la opinión vecinal, que en su mayoría, coincidió con la idea de la Junta. Su argumento fue el de que con viviendas nuevas "ganarían en calidad al tener ascensor o plaza de garaje y además, se revalorizarían", señaló Castiñeira. Algunos residentes, sobre todo gente mayor, se opusieron entonces por motivos sentimentales y por el trastorno de tener que trasladarse a otro lugar hasta que estén construidas las nuevas viviendas.

DISEÑANDO LOS EDIFICIOS Ayer, Javier Corominas desveló que ya se están diseñando los nuevos edificios, aunque advirtió de que para comenzar las obras, antes es necesario realizar una modificación del plan de ordenación urbana, que el ayuntamiento está tramitando. Según sus cálculos, el equipo de gobierno podría llevar esta modificación al pleno del mes de junio para dar así luz verde a las obras.

Aunque el presidente de la agencia regional no dio más detalles de este proyecto porque acudió a firmar un convenio para rehabilitar los pisos sindicales situados en La Data Vieja, Castiñeira apuntó a principios del 2006 la posibilidad de que los vecinos no tengan que hacer desembolso alguno, ya que "la Junta obtendría fondos de las viviendas donde residirían temporalmente, que luego vendería y los bloques nuevos tendrían más pisos, también para venderlos".