Las losetas de las fachadas de San Calixto se siguen cayendo a la calle y no se repararán, de momento, porque los constructores han preferido poner un aval en lugar de ejecutar las obras hasta que el Tribunal Supremo resuelva el recurso que han interpuesto contra la condena por defectos en la construcción. Mientras tanto, los bomberos volvieron el domingo a fijar varias losetas en uno de los edificios que dan a Obispo Varela ante el riesgo de desprendimiento a petición de vecinos afectados.

La sentencia, del juzgado número 3 de Plasencia y ratificada por la Audiencia provincial en enero y abril pasados, respectivamente, condena a los hermanos Paredes a realizar todas las obras necesarias para reparar los desperfectos en las viviendas de 150 vecinos y, entre ellos, las plaquetas de las fachadas que caen a la calle porque su anclaje es insuficiente, con el consiguiente riesgo para los viandantes. Por lo que si causan algún accidente, la responsabilidad será de los promotores tal y como recoge el fallo, según fuentes judiciales. Los demandantes han pedido ejecución de sentencia, pero los constructores han preferido presentar un recurso que puede tardar años en resolverse aunque aún no se sabe si será o no admitido.