Los vendedores no tendrán que seguir limpiando la plaza de abastos porque el lunes se incorpora ya el personal municipal de limpieza. Los comerciantes han estado, durante más de dos meses, supliendo la falta de limpiadoras por lo que la federación de empresarios llegó a presentar con fecha del 2 de abril una queja formal al ayuntamiento.

La explicación que dio el ayuntamiento es que habían terminado los contratos y no se podían renovar hasta contar con los fondos regionales que anualmente subvencionan estos y alrededor de setenta puestos de trabajo más en diversos servicios municipales donde también se ha dejado notar la falta de personal. Pero el viernes pasado llegó ya la confirmación de la Junta, según explicó ayer la concejala de Personal, Carmen Blázquez, y los funcionarios municipales están trabajando contrarreloj para seleccionar al personal.

QUEJA FORMAL Mientras tanto, los vendedores de la plaza de abastos han asumido la limpieza del recinto municipal para garantizar la higiene porque de cuatro limpiadoras asignadas a este servicio, últimamente solo ha habido una, según indicó su presidente, Alfonso Llorente Sete. Esta circunstancia motivó el escrito presentado por la federación de empresarios dando queja de "cierta desidia" en la limpieza del mercado de abastos.

Si bien no es el único servicio municipal que se ha visto afectado por el retraso de los fondos regionales y el segundo más perjudicado tras el de limpieza ha sido la brigada de obras. A esta faltan por asignarse catorce peones mientras que son doce las limpiadoras a contratar para cubrir los colegios y otros edificios municipales. Son el grueso de empleos temporales que se están seleccionando ahora.