El alcalde en funciones, Pablo Sánchez del Mazo, ha asegurado esta semana que la nueva piscina prevista en San Miguel "puede y debe estar en esta legislatura", es decir, como máximo en el 2007.

Con este propósito, el concejal pidió tranquilidad a la asociación de vecinos del barrio que había amenazado con adoptar medidas de presión porque ya llevan nueve años solicitando una piscina que vendría a resolver los problemas de capacidad de la actual, según ha reconocido la alcaldesa.

Del Mazo también insistió en que "el gobierno quiere hacer la piscina en San Miguel porque la ciudad la necesita, pero hay que ir priorizando y el instituto estaba antes". Con todo, quiso aclarar al colectivo vecinal que se construirá "una piscina para Plasencia, no para el barrio de San Miguel".