La comunidad de vecinos del pasaje del Salvador lleva más de media docena de escritos registrados en el ayuntamiento y numerosas llamadas de teléfono a la policía local para quejarse de que los ruidos del pub que tienen justamente enfrente no les dejan dormir. "Estamos temiendo que lleguen los jueves porque hasta el domingo no hay quien duerma y aquí hay personas mayores, bebés y gente que trabaja con derecho al descanso".

Así lo resume uno de los veintidós vecinos afectados en cuyos escritos solicitan al ayuntamiento que comprueben si este local está insonorizado, que lo dudan, y que haga cumplir el horario de cierre, que aseguran que lo incumple. Pero hasta la fecha no han tenido respuesta del gobierno de Elia Blanco como tampoco la obtuvieron antes del de José Luis Díaz así es que los vecinos mostraban ayer su impotencia.

ZONA SATURADA Tanto que el último escrito lo presentaron a finales del 2003 y no han vuelto a hacer ninguno convencidos de que "no sirve para nada", pero ayer se lamentaban de que "tampoco han servido de mucho nuestras llamadas de madrugada a la policía local así es que no sabemos qué hacer". Aunque reconocieron que algunos locales próximos sí están insonorizados, se quejaron también del ruido de ir y venir de gente y de que al día siguiente aparecen restos de la movida esparcidos por las calles del centro, donde se concentra la mayor parte de locales de copa nocturnos.