La estación de autobuses acogerá hasta el 31 de septiembre, la exposición Tras las huellas de Orellana , consistente en una muestra de imágenes que reproducen el viaje que realizaron cuatro miembros de la Asociación Natura 2000 el pasado noviembre por la cuenca amazónica.

La muestra reproduce a través de 32 fotografías el viaje que llevaron a cabo los miembros de Natura 2000, Javier Jiménez, Marcos Coronado, José Rubio y Salvador Vaquero.

Con todo ello, las expedicionarios pretenden transmitir las aventuras vividas durante un mes en los rincones de la selva más inhóspitos, como lo hiciera el extremeño Francisco de Orellana hace casi quinientos años.

De este modo, las imágenes expuestas mostrarán los lugares visitados así como las tribus que habitan en las orillas del gran río, los animales que pueblan estas selvas y el río Amazonas.

PROTECCION DE LA AMAZONIA Esta expedición partió el 8 de noviembre del municipio cacereño de Trujillo, ciudad de la que es oriundo el conquistador Francisco de Orellana, y terminó un mes más tarde, tras seguir las huellas del conquistador extremeño por la cuenca brasileña del río más caudaloso del mundo.

Los expedicionarios visitaron las aldeas de Terra Preta, donde se concentran algunos descendientes de los baniguas y barés que habitaran durante siglos las selvas del río Negro; y la de Los Otopé, un pequeño poblado de chozas donde habitan una comunidad estable de indígenas procedentes del río Isana.

Asimismo, aseguraron que sobrevivir en la cuenca amazónica es sumamente difícil por los peligrosos animales y vegetales que habitan. Además, los expedicionarios se adentraron en las zonas "más inhabitadas" por el hombre, donde realizaron rutas de conocimiento del medio a través de la selva virgen.

"La realidad es que faltan medios para garantizar mínimamente la protección de los sensibles ecosistemas de la selva tropical, en un lugar donde la ley del talión sigue siendo aplicada por muchos de los habitantes", explican desde la asociación.