Las nuevas medidas de seguridad instaladas por la joyería Rodiel tras el robo sufrido en noviembre surtieron efecto y permitieron que la escena no se repitiera. Tan sólo un día después de los robos del polígono industrial, varios ladrones golpearon previsiblemente con un coche la persiana que cierra la joyería para entrar a robar en torno a las 3.30 horas de la madrugada. La alarma saltó y no lograron subir la persiana para robar el escaparate, por lo que huyeron sin ser vistos.