El ayuntamiento ya tiene en su poder un estudio pormenorizado del estado que presenta el palacio de Mirabel y los técnicos municipales deberán evaluar ahora el coste de la rehabilitación para que el Plan de Excelencia Turística negocie con la familia en qué condiciones se puede acometer. Su objetivo es abrir el público los jardines y el aljibe del edificio, que necesitan una reforma integral.