El gasto mínimo de agua subirá en el recibo del 2005 casi un 17% menos con la medida que sacó adelante la oposición en el pleno que con la que había propuesto el gobierno del PSOE y que al final se aprobó por unanimidad. Lo que afectará al bolsillo de todos los ciudadanos porque éste es el tramo de consumo común y a partir de ahí pagarán más los que más gasten.

Así son las cosas aunque el PP, que capitalizó en el pleno su defensa, no aclaró en qué iba a beneficiar a los ciudadanos, lo que aprovechó la alcaldesa para censurar que la oposición sólo quería torpedear al gobierno del PSOE en una demostración de fuerza. Pero lo cierto es que la exsocialista Josefa Pérez, ya edil no adscrita, votó como el PP y el CCPL poniendo en evidencia la minoría del PSOE.

No obstante, Elia Blanco estuvo hábil porque concedió a Camisón la palabra para que se explicara aunque por ley le está permitido el voto, pero no la voz, y la concejala renunció con el argumento de que no le había dado tiempo a estudiarse las nuevas tasas. Aún así votó la que propuso la oposición y la alcaldesa optó también por aprobarla apelando a un ejercicio de responsabilidad porque por ley las ordenanzas fiscales tienen que aprobarse antes de final de año.

Pero las diferencias vinieron sólo por la tasa de agua porque el resto de los precios públicos propuestos por el PSOE en el conjunto de las ordenanzas fiscales, que suben, como el IPC un 3,2%, fueron aceptados por la oposición.