Los muros exteriores del aparcamiento de la Puerta del Sol no van a lucir más grafitis. Al menos autorizados, como hasta ahora, porque sus propietarios han retirado el permiso ante los abusos de algunos que han pintado hasta el suelo, las farolas o los contenedores de alrededor. Esta es la razón por la que han empezado a blanquear el perímetro del parking aunque hayan parado estos días a causa de la lluvia y todavía sigan intactos los que dan a la antigua travesía.

"Lo vamos a blanquear todo --confirmaron fuentes del aparcamiento-- y si vemos a alguien pintando, tendremos que denunciarlo". Desde hace años, y a través del ayuntamiento, la asociación local de grafiteros ha tenido autorización de los duelos del parking para dar rienda suelta a su creatividad en estos muros. Pero algunos aficionados al graffiti se han extralimitado pintando, incluso, el mobiliario público de los alrededores provocando conflicto con los vecinos. "A nosotros nos han pintado hasta el escaparate --indican desde la óptica de Alain Afflelou-- y hasta se han enfrentado con nosotros los autores, menores, cuando les hemos llamado la atención". De hecho recientemente la policía local tuvo que intervenir, alertados por una vecina que los vio pintando el acerado y las farolas.

"Lo sentimos porque van a pagar justos por pecadores --admitió la propiedad-- pero han abusado de nuestra confianza". También van a blanquear los últimos grafitis hecho junto a un bar de próxima apertura con dibujos alusivos porque "ni nos han pedido permiso --añadieron-- ni nunca lo hemos querido dar con fines publicitarios, solo para que hicieran grafitis artísticos". Con este ánimo la concejalía de Juventud puso hace unos años muros a disposición de la asociación, que siempre se ha desmarcado de quienes pintan a su antojo en cualquier parte. Prácticas que perjudican, además de a los vecinos afectados, a los grafiteros legales que acaban de perder un espacio autorizado.