La obra de pavimentación de la calle del Sol lleva parada toda la semana por falta de material. Una vez recibido el nuevo granito, el ayuntamiento ha decidido encargar otro que resulte menos triste con lo que la empresa no podrá retomar las obras previsiblemente hasta mañana.

Es un nuevo capítulo de una obra que tiene indignados a los comerciantes, cuyo sentimiento generalizado es el de sentirse burlados por el ayuntamiento después de que les pidiera el esfuerzo de cerrar por las tardes durante tres semanas para agilizar los trabajos en mayores condiciones de seguridad. Ese plazo se ha cumplido con la calle aún levantada y las tiendas llenas de polvo mientras los comerciantes han decidido reabrir por las tardes para evitar más pérdidas económicas.