¿Quién no ha saltado a la comba cuando era niña o jugado a bote-botero, al pañuelo o a un, dos, tres, pollito inglés ?. El colegio de La Paz ha querido echar la vista atrás y recuperar éstos y otros juegos con el fin de "fomentar los valores de amistad y de cooperación.

La oportunidad ha llegado con su semana cultural, previa a la festividad del Día de La Paz que se celebra hoy. Así, los alumnos han jugado a los juegos de sus padres gracias a la ayuda de los 17 profesores del centro y algunas madres. "Los niños de ahora no saben saltar a la comba, ya no juegan en la calle", explica la profesora Carmen Pérez, sin embargo, la semana pasada han dedicado los recreos a estos juegos: "Han participado en carreras de sacos, la semana, el pañuelo, bote-botero, palmas corridas y muchos más", señala una entusiasta María Jesús Pantrigo, profesora de educación musical.

El resultado ha sido una diversión sin límites: "No había jugado antes a bote-botero, pero me gusta mucho", afirma Poveda, mientras Amanda apunta: "Yo sí había jugado a algunos pero no con los amigos, en las actividades extraescolares".

Además, el colegio también ha estrenado una biblioteca y para inaugurarla, alumnos de quinto curso representaron un cuento instrumentado con marionetas e inventado por ellos: El pueblo que no conocía la amistad .