Mientras hoy se pondrá la primera piedra del nuevo palacio de Justicia, CCOO ha puesto voz a las quejas del personal que trabaja en el actual edificio de los juzgados por, al menos, una docena de deficiencias que llevan años soportando. Por eso, piden un mantenimiento diario para que "se pueda trabajar en las mejoras condiciones" hasta que esté lista la nueva sede.

Lo dice Agustín Yuste, representante de CCOO y que hace de cicerone en un recorrido por un edificio que data del siglo XV y que acoge los juzgados desde 1977. En la entrada principal, destacan las humedades y un parcheo por el arreglo de una tubería ante el registro civil.

Además, el juzgado número 1 no tiene aire acondicionado y solo dispone de uno portátil. La accesibilidad es limitada porque hay una rampa ante la puerta de la Fiscalía, pero hay que llamar a los vigilantes para abrir los portones. También el archivo, estrenado hace cinco años, tiene goteras, humedades y temperaturas de extremo frío o calor.

Otra de las quejas de Yuste es que falta iluminación; que material de oficina se amontona durante años fuera de las oficinas y el mal estado del mobiliario; baños y el ascensor, que se atasca con más de tres personas. También han pedido un directorio sobre la ubicación de los juzgados que nunca llegó y todo en un edificio en el que trabajan unas 80 personas.

TIEMPO EN CORREOS Además, Yuste explica que el trabajo se ha multiplicado porque el volumen de casos civiles ha pasado de 600 a 1.200. Por esto además reclama una mejora del sistema del correo de la misma forma que funciona en Cáceres.

"Allí, van a los juzgados a repartir y recoger el correo, pero aquí, somos 7 funcionarios los que tenemos que pasar diariamente de 45 minutos a una hora en Correos para que nos lo sellen y eso es un perjuicio para nosotros y el ciudadano".