El aforo máximo de la piscina municipal es de 1.000 personas, según indica un cartel a la entrada, capacidad que contrasta con el número de habitantes --más de 38.900 habitantes, según el padrón-- y supone que sólo cubre la demanda del 2,57 por ciento de los placentinos.

Este es el número de personas que puede permanecer a la vez en todo el recinto municipal, pero el de bañistas en las tres piscinas se reduce hasta 390 mientras que a diario la visitan de media entre 1.500 y 1.600 usuarios, según fuentes municipales, lo que confirma que está saturada como viene denunciando la Asociación de Vecinos de San Miguel al reclamar por noveno año consecutivo la construcción de la piscina de la zona sur.

INCUMPLIMIENTOComo también es la opinión generalizada entre los bañistas y la propia alcaldesa, Elia Blanco, reconoció esta semana la necesidad de contar con una segunda piscina municipal para la que desde hace nueve años que los presupuestos municipales tienen sucesivamente una partida reservada sin que haya aún visos de realidad.

Así las cosas, la asociación ha decidido dar un matiz reivindicativo a las fiestas vecinales de San Miguel mientras los bañistas que optan por la piscina municipal tienen que abrirse hueco entre los 200 de capacidad que tiene la olímpica --de 50 metros-- los 90 de la mediana --de 25-- y los mismos de la infantil, según consta en los documentos oficiales que el ayuntamiento aporta a la Junta de Extremadura.