Menudo susto se llevó ayer una conductora cuando un pivote se levantó sorpresivamente mientras sacaba el coche del Rincón de San Esteban. Por suerte no le causó grandes daños, pero los suficientes como para tener que dar parte al seguro aunque pudo seguir circulando con la ayuda de la policía local, que no tardó en llegar y acabó vallando la pilona automática para evitar más incidentes.

Aunque no es el primer coche que se queda atascado en el mismo sitio y suele ser habitual ver cómo este pivote se sube y se baja sin causa aparente. Para acceder a San Esteban es necesario disponer del mando a distancia que el ayuntamiento sólo entrega a los residentes, pero para salir optó por un sensor que debería activarse al paso de un vehículo, pero parece que el sistema falla y los más molestos son los empleados de la plaza de abastos por lo que pueda pasarle a los bajos de sus coches.

Lo cierto es que este pivote cayó en desgracia desde el principio porque nunca ha llegado a funcionar a pleno rendimiento a petición de la plaza de abastos, que tras varias protestas consiguió que el ayuntamiento mantuviera abierto el acceso desde la calle Zapatería y la salida por calle Trujillo. Aunque los vendedores se quejan de que no siempre se respeta el paso por la calle Zapatería.