El concejal del PP Fernando Pizarro anunció ayer oficialmente su candidatura para presidir el partido a nivel local. Lo hizo arropado por un grupo de militantes, tanto de la vieja guardia como de Nuevas Generaciones, y para dejar claro que la suya "no es una candidatura personalista sino un proyecto de partido, de unidad, cohesión y consenso".

Un consenso que no ha habido en el proceso de presentación de candidaturas puesto que José Luis Díaz mantiene sus intenciones de optar también a la presidencia del PP. Ambos presentarán hoy sus candidaturas, con los 50 avales necesarios, en la sede provincial popular. Ante la iniciativa de José Luis Díaz, Pizarro indicó: "Puede haber distintas voluntades, pero la idea es la de la unidad dentro del partido. Este es un proceso limpio, transparente e interno, sin que esto suponga ninguna guerra ni enfrentamientos".

En su caso, aclaró que no ha dado el paso de presentar su candidatura "por ninguna imposición de fuera", sino por responsabilidad, dado que lleva 16 años afiliado al PP y tres legislaturas en el ayuntamiento. También porque afirma contar con el apoyo mayoritario de los 1.200 afiliados del partido.

En primer lugar, destacó el apoyo del grupo municipal del PP en el ayuntamiento, con su portavoz, Miguel Cantero, a la cabeza, que le acompañó en su comparecencia pública. Resaltó también el respaldo del "grupo del futuro", las Nuevas Generaciones del PP y el del 90% de la junta local saliente, dijo.

Subrayó además que detrás de su candidatura hay un proyecto: "De unidad, consenso, cohesión del PP y fortaleza, destinado a gobernar en la próxima legislatura, unido a la ciudad y a un gran proyecto de partido que dirige José Antonio Monago".

Pizarro repitió en varias ocasiones la palabra unidad, tanto que, en alusión a José Luis Díaz, afirmó: "Hemos presentado un proyecto de ciudad abierto al 100% de los afiliados". Insistió además en esta idea al pensar en un hipotético día después de la victoria: "En la familia del PP no sobra nadie".