El anunciado plan de austeridad del gobierno popular, que elabora actualmente las cuentas del ejercicio 2012, tiene consecuencias directas en los colectivos vecinales. Estas asociaciones --hasta 17, integradas en la FEPAVE (Federación Vecinal Placentina)-- han empezado ya a cobrar el pago de subvenciones correspondiente al presente año, pero aun desconocen si en 2012 estas ayudas se recortarán aun más o si, directamente, el Ayuntamiento de Plasencia las eliminará por completo, como se anunció en la reunión que los colectivos mantuvieron con los ediles de Hacienda y Distritos --José Antonio Hernández y José María Nisa, respectivamente, el mes pasado.

La cantidad a repartir en 2011 es de 38.000 euros, casi un 40% menos que hace dos años (en mayo se aprobó un recorte del 25%). "Existe la creencia de que los colectivos vecinales solo piden dinero para hacer fiestas" explicó el presidente de Ciudad Jardín, Juan Benito, que ha solicitado un encuentro con el alcalde, Fernando Pizarro, para solucionar el dilema que se les ha planteado con la prometida sede vecinal --el edil Nisa, según Benito, les prometió la Casa del Guarda, que ahora es la sede de Protección Civil-- en un momento en el que están a punto de unirse a Valcorchero en un solo colectivo vecinal, que supondría aglutinar a 1.300 familias.

"No existe voluntad política. Comprendemos que es más necesario que Protección Civil tenga una sede por la labor encomiable que realizan, pero existen otros locales en Sor Valentina, Finca Capote donde se puede consensuar un lugar para esta asociación" argumenta Juan Benito, que aclara que "solicitamos una sede para desarrollar allí talleres y actividades sociales". Ciertamente, el Plan Estratégico de Subvenciones recoge que se priorizarán aquellos proyectos de caracter social, como alternativas de ocio, la inserción laboral y la prevención del abuso de drogas, para hacer el reparto económico de las subvenciones. "Es lógico que con 5.000 parados en Plasencia no se den subvenciones para actividades lúdicas y que ese dinero se revierta en mantener las subvenciones a entidades sociales, pero si no podemos crecer como colectivo por falta de subvenciones, que lo aceptamos, y por no contar con un local donde hacer una integración, tendremos que plantearnos nuestra razón de ser como asociación" zanjó el presidente de Ciudad Jardín.

Por su parte, la presidenta del colectivo vecinal Vera-Elena, Guadalupe Blázquez, también matizó que la falta de ayudas supondrá una merma "no solo en el desarrollo de actividades" como es el caso de la Semana Cultural, "sino también en el mantenimiento de la sede" y los gastos en fontanería, electricidad que acarrea. "Si hay subvención, pedimos que sea lo justo para mantener la sede vecinal".