El alcalde de Plasencia, Fernando Pizarro, anuncia que la ciudad se enfrenta a un embargo "masivo" de sus bienes si el juzgado no acepta el plan urbanístico diseñado por el Gobierno local para poder pagar la sentencia de las huertas de La Isla.

El Ayuntamiento de Plasencia ha diseñado un plan urbanístico para pagar cerca de 50 millones de euros a los propietarios de las huertas de La Isla, que se caracteriza por permitir la construcción de un total de 10 bloques de viviendas, de entre 9 y 15 alturas, en las propias huertas y otros tres espacios públicos.

Tras haber fallado el Tribunal Supremo en contra de los intereses municipales en un conflicto urbanístico que se originó en el año 1970, el Gobierno local se ha apoyado en la revisión del Plan General Municipal, actualmente en ejecución, para buscar una salida urbanística que evite el colapso total de las arcas municipales.

En este sentido, el alcalde, Fernando Pizarro ha indicado hoy en rueda de prensa que si el juzgado no acepta que el Consistorio pueda pagar las huertas por medio del citado plan, la ciudad se enfrentará a un "embargo masivo" de sus propiedades.

El primer edil se ha referido a las críticas vertidas por los vecinos del barrio de Rosal de Ayala -lo más perjudicados por la aplicación futura del plan- y ha subrayado que "entiende" que la gente no quiera que se construya una torre de viviendas a las puertas de su casa, a la vez que ha asegurado que el aparcamiento en la zona no se verá resentido.

"Si no queremos que nos embarguen, construir en las huertas es el mal menor de esta situación", ha asegurado Pizarro antes de afirmar que el desarrollo urbanístico que se plantea "no será ni mucho menos inmediato" ya que pasarán muchos años antes de que se construya nada.

El alcalde ha insistido en que la propuesta del Gobierno local no es un "capricho de nadie" y ha destacado que se trata de una propuestas "muy reflexionada" tanto desde el punto de vista técnico como político.