El Ayuntamiento de Plasencia tiene una situación financiera complicada para hacer frente a las necesidades sociales y económicas generadas por el coronavirus debido esencialmente a la deuda de las huertas de La Isla. Así, después de haber pedido al Ministerio de Hacienda que condone o flexibilice las condiciones de pago del crédito que solicitó por 24 millones, ahora ha pedido a los expropietarios que condonen los intereses.
Según ha explicado el alcalde, Fernando Pizarro, ya se han abonado dos pagos, por un valor total de 2,2 millones, pero todavía restan por pagar otros 10 millones, a razón de 1,1 anual. “Esta es una situación excepcional que requiere ayudas excepcionales y el apoyo de todo el mundo”. Pizarro ha recordado que los expropietarios ya han cobrado más de 36 millones y “no han perdonado un solo euro al ayuntamiento” por una expropiación que terminó con sentencias condenatorias para la administración local.
En caso de no condonar la deuda al completo, el ayuntamiento ha solicitado por escrito que se condone la cantidad de este año, de un millón de euros y se negocie una reducción de los 10 millones que restan por pagar. Hasta el momento, solo una empresa ha llegado a un acuerdo y ha cobrado su parte a cambio de una quita.
El objetivo es que ese millón que está en los presupuestos de este año “se destine a hacer frente a cuestiones de esta crisis, a las personas vulnerables y a pymes y autónomos para ampliar esa línea de 400.000 euros" anunciada. Pizarro ha subrayado que es una cuestión “de justicia. Nosotros hemos cumplido sobradamente a lo largo de diez años y no pierdo la esperanza de que piensen en las necesidades de esta ciudad, es una cuestión de solidaridad”. Porque además, la condonación de la deuda podría anular el plan de ajuste al que está obligado el ayuntamiento y “esto permitiría facilitar bonificaciones del IBI o el impuesto de vehículos”.
Por otro lado, a través del grupo popular en la Diputación de Cáceres, se ha pedido también la eliminación del pago de la deuda correspondiente a este año por el servicio de bomberos, de 1,3 millones y que el Plan Reactiva de la administración provincial también llegue a Plasencia. “Ahora es el momento de ayudar a las familias más vulnerables”, ha dijo Pizarro.
