El pasado mes de marzo, el alcalde Fernando Pizarro anunciaba que, dentro de tres años, cumplirá el contrato con la unión de empresas que gestiona el servicio del agua en Plasencia y, hasta ese momento, la UTE debía llevar a cabo obras en la ciudad por valor de unos 10 millones de euros. Entonces comenzaban unas reuniones con la nueva gerencia de la empresa para concretar esas inversiones y ayer, Pizarro explicó que ese acuerdo o convenio «está a punto de culminarse» y su previsión es que, en el mes de julio, se pueda llevar a pleno para su aprobación.

A su vez, la empresa deberá aprobarlo en su consejo de administración. Se trata de un documento para «ajustar cada necesidad a las cantidades económicas que tenemos». Porque el alcalde electo recordó que, en el pliego de condiciones de la licitación, se establecían las inversiones y algunas, como una tubería que conecta Valcorchero con la ciudad y las relacionadas con la depuradora, las sufragarán otras administraciones, con lo que es necesario sustituirlas por otras.

A su vez, se añadirán algunas que no estaban concretadas, en función de las necesidades actuales en la ciudad. La que no hay duda que estará será la renovación de las redes en las avenidas de España y Martín Palomino, valorada en unos dos millones de euros. Pero Pizarro enumeró ayer otras como el cambio de tuberías en la calle Coria, en la calle Santa Ana y en la zona del Salvador. También en el depósito y en las tuberías de transporte de la ciudad, las de mayor envergadura.

En marzo, habló también de la conducción de agua hasta la urbanización del kilómetro 4 y el arreglo de conducciones que se averían con frecuencia, como sucede en Dolores Ibárruri, Antonio Vicente Arce o la carretera de Malpartida.

Estas y otras aparecerán en ese convenio que la empresa tendrá que aprobar en su consejo de administración y el ayuntamiento en el pleno. Hasta ahora, no han podido llevarse a cabo por procesos judiciales que enfrentaron a ambas partes y que han terminado dando la razón al ayuntamiento. Los responsables municipales y los nuevos directivos han mantenido desde entonces una buena relación y han tratado de «acortar los plazos para hacer las inversiones al 100%».